domingo, 2 de octubre de 2016

JORNADA Nº8 (REAL ZARAGOZA - CÓRDOBA)

LaLiga 1|2|3             2016/2017

8ª jornada (1/10/16)

Real Zaragoza         1   -   1        Córdoba       
   

MAL EL EQUIPO Y PEOR EL ARBITRO. O AL REVES



No darse nunca por vencido es una consigna aplicable a cualquier ámbito de la vida y el fútbol no es una excepción. La rendición y la bajada de brazos que mostró el equipo la pasada jornada en Soria preocupaban al técnico Luis Milla, quien no veía los motivos para tirar la toalla. No existía lugar mejor para redimirse de los errores cometidos en Los Pajaritos que La Romareda. Ante los suyos, los pupilos de Milla tenían la oportunidad de volver a la senda de la victoria y continuar con el pleno de puntos como local. Enfrente, un conjunto aspirante al ascenso, el Córdoba. El conjunto andaluz viajaba a tierras mañas con el objetivo de romper la fortaleza aragonesa y llevarse de vuelta algún premio. Para seguir haciendo de La Romareda un seguro de vida y pese al resultado negativo de la jornada anterior, Luis Milla decidió alinear de inicio a los mismos once jugadores que en el encuentro anterior.
Imprecisión e indecisión. No, no son dos jugadores del conjunto blanquillo. Se trata de las muestras constantes que reflejaba el Real Zaragoza sobre el campo: Portero nervioso debido a pasadas actuaciones, defensa insegura con dos laterales empeñados en no aportar nada positivo y dos centrales que tan pronto te dan una de cal como otra de arena, mediocampo insuficiente con un Zapater que no llega a todo (indudable el sacrificio y esfuerzo del ejeano) y con Ros (no se encuentra sobre el césped) y Morán (está para echarlo a los leones. O, por lo menos, mandarle un tiempo al banquillo o a la grada) deambulando sobre el campo y una delantera con Ángel desubicado en la banda, Lanzarote a cuenta gotas y Muñoz desaparecido en punta.
Resumen completo de lo que fue la primera parte. Una llegada visitante por la banda izquierda hasta el área zaragocista fue frenada bruscamente por Casado, quién cometió penalti. La pena máxima fue materializada por el jugador con pasado zaragocista Rodri, quien batió sin problemas a Irureta y adelantaba a su equipo en el marcador.
La nula capacidad de reacción demostrada por el equipo en Soria tras encajar gol pintaba un horizonte muy negro para los aficionados zaragocistas. Afortunadamente, no tardó demasiado en reaccionar el conjunto aragonés. Y, como no, fue a balón parado. Y, como no, Lanzarote fue el asistente, esta vez, desde la esquina. El extremo sacó de nuevo su magia y Cabrera, tras peinar el balón Casado en el primer palo, culminó el truco de magia enviando desde el área chica el balón al fondo de las mallas.
 Pero al partido le salió un protagonista inesperado, el colegiado. El arbitro del encuentro creyó insuficiente su rol de secundario y decidió tener mayor protagonismo. Volviendo al juego, el conjunto local seguía con su juego horizontal mientras que los visitantes trataban de mantener el orden defensivo y atacar por las autopistas que los blanquillos tenían en las bandas (por fortuna, no supusieron demasiado peaje a los aragoneses). Se llegó al descanso no sin antes presenciar el espectáculo montado por el árbitro, quien amonestó a Lanzarote por algún motivo (sólo el colegiado sabrá el porqué de la tarjeta amarilla).
El paso por vestuarios dejó a Isaac en la banqueta, relevado por Fran. El guion de la segunda mitad estuvo marcado por los andaluces, quienes tomaron el control del esférico gracias a la inaptitud de Ros y Morán (el primero ha demostrado con anterioridad que sabe hacerlo mejor, pero al centrocampista vasco todavía se le espera que demuestre aptitudes validas) y al cansancio físico de Zapater. Las escasas ocasiones de peligro creadas por locales manaban de las botas de Lanzarote y apenas cabe destacar un disparo de Ángel que acabó cerca del banderín de córner (muy mal en la definición Ángel, pero al menos se mueve y trata de crear peligro. Cosa que el delantero centro titular del partido de hoy no ha demostrado en los minutos disputados durante su corta estancia en el club). Viendo que el cansancio hacía mella en los jugadores visitantes, Milla decidió dar frescura a la banda y dio entrada a Edu García, quien saltó al césped por Muñoz y pasó ocupar la banda izquierda dejando a Ángel como referencia arriba. Pero el zaragozano, pese al indudable esfuerzo, no pudo actuar de revulsivo y no supuso el efecto que buscaba el técnico turolense con el cambio. También saltó al césped, ya en la recta final, y en lugar de un pésimo Ros, Pombo. El canterano trató de dar orden a la medular pero no sirvió de mucho su entrada ya que el partido estaba condenado al empate. Salvo que algún error de los locales les volviese a condenar o bien porque el arbitro quisiera culminar su nefasta actuación con otra aberración más. Nada de esto último ocurrió y los blanquillos continúan invictos como locales aunque pierden una oportunidad de recortar puntos a sus rivales.
Próxima jornada ante el filial sevillista en su feudo.




En la pasada jornada elegisteis a Zapater (60%) como mejor jugador del partido y a Erik Morán (55%) como peor jugador del encuentro. 


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